George Milton
George Milton es nuestro héroe, un granjero errante, "pequeño y rápido, de tez oscura, con una mirada inquieta y alerta, y facciones marcadas… [con] manos fuertes y pequeñas, brazos delgados, y una nariz fina y huesuda." (small and quick, dark of face, with restless eyes and sharp, strong features … [with] small, strong hands, slender arms, and thin and bony nose) (1.4)
Pero él es más que un hombre inteligente y espabilado: quizás no lo demuestre demasiado pero George es una persona muy buena y correcta.
Descubramos qué es lo que lo motiva.
Con amigos así, ¿quién necesita enemigos?
Aunque parezca extraño, lo que motiva a George es su gigante y tonto amigo, Lennie. Pero George no quiere darle a Lennie uno de esos collares de amistad que uno compraba en sexto grado. (Aunque quizás Lennie quiera darle uno a George). De hecho, no trata muy bien a Lennie. Tomemos como ejemplo las primeras palabras de George:
"Lennie!" he said sharply. "Lennie, for God' sakes don't drink so much." (1.6)
¿Amor tierno y dulce? No precisamente. Y mira cómo le grita a su supuesto amigo cuando hablan de kétchup:
"Well, we ain't got any … God a'mighty, if I was alone I could live so easy. I could go get a job an' work, an' no trouble. No mess at all, and when the end of the month come I could take my fifty bucks and go into town and get whatever I want. Why, I could stay in a cathouse all night. I could eat any place I want, hotel or any place, and order any damn thing I could think of. An' I could do all that every damn month. Get a gallon of whisky, or set in a pool room and play cards or shoot pool… An' whatta I got … I got you! You can't keep a job and you lose me ever' job I get. Jus' keep me shovin' all over the country all the time." (1.89)
Cuando uno lo ve así, no tiene sentido que George no abandone a Lennie. Pero tiene sus motivos: en realidad, él no quiere ir a los burdeles ni a los salones de billar ni a hoteles ni vaciar botellas de whisky. La mayoría de los empleados de los ranchos, dice George, son hombres solitarios y resentidos, pero ni él ni Lennie son así:
"We got a future. We got somebody to talk to that gives a damn about us. We don't have to sit in no bar room blowin' in our jack jus' because we got no place else to go. If them other guys gets in jail they can rot for all anybody gives a damn. But not us" (1.115).
Lennie quizás no sea excelente compañía, pero es compañía al fin y al cabo. Para George, es alguien por quien puede preocuparse y cuidar. Incluso, los peligrosos hábitos de Lennie para tomar agua demuestran que George le tiene cariño, aun cuando dice: "Al diablo con los conejos. En lo único que piensas es en conejos" (The hell with the rabbits. That's all you can ever remember is them rabbits) (1.18-19). George quizás se canse de los conejos, pero le sigue hablando a Lennie sobre la granja de sus sueños, su historia favorita para irse a dormir, y sigue cuidando a Lennie siempre que puede.
El mundo soñará unido
Lennie, sin duda, se beneficia de la amistad. Pero no es el único. George obtiene compañía, y también una oportunidad para soñar. Al final de la novela, después de la muerte de Lennie, George le habla a Slim sobre la granja:
"I think I knowed from the very first. I think I knowed we'd never do her. He usta like to hear about it so much I got to thinking maybe we would" (5.78).
Cuando está solo, George sabe que la granja es un sueño tonto, como imaginarse que uno vivirá en una mansión en Malibú algún día. (A menos que tú ya vivas en una mansión en Malibú, en cuyo caso, ¡felicitaciones! ¡Vive el sueño!) Pero con Lennie, George puede creer. ¿Escuchaste alguna vez decir que los niños son el futuro? Lennie es como el hijo de George. Cuando estaba con Lennie, George podía soñar con un futuro, un verdadero sueño americano del que cada día estaba más cerca.
Burdeles y salones de billar
Toda esta esperanza hace que el final de George sea aún más trágico que el final de Lennie. Sí, Lennie muere, pero es una muerte misericordiosa y a juzgar por el contexto de la historia, es probable que sea mejor así. (Al menos Steinbeck así lo cree). Pero George se convirtió en uno de esos solitarios empleados de rancho que describe al principio de la novela, esos hombres que "no tienen familia. No pertenecen a ningún lugar. Trabajan en el rancho, ahorran un poco de dinero y van a la ciudad a derrocharlo. Y así sin más, se van a trabajar a otro rancho. No tienen ningún plan a futuro que los motive" (got no fambly. They don't belong no place. They come to a ranch an' work up a stake and then they go inta town and blow their stake, and the first thing you know they're poundin' their tail on some other ranch. They ain't got nothing to look ahead to) (1.113).
Pero George y Lennie se tienen el uno al otro, hasta que no se tienen más. Después de que Lennie muere, George le dice a Slim:
"I'll work my month an' I'll take my fifty bucks an' I'll stay all night in some lousy cat house. Or I'll set in some poolroom til ever'body goes home. An' then I'll come back an' work another month an' I'll have fifty bucks more" (5.79-80).
Ahora, George es uno más del montón. Es un alma perdida en la Gran Depresión, un vagabundo que viaja de granja en granja en busca de trabajo eventual y de baja categoría. No tiene motivos para vivir y ninguna esperanza de que las cosas mejoren. Lennie quizás haya sido un grandulón, tonto y molesto, pero también hacía sentir especial a George.
Trabajo de hombre
También podemos decir que George es especial de por sí: tiene la innata claridad moral que le permite darse cuenta de que matar a Lennie es lo correcto.
Pongamos esto en contexto, Shmoopers: cuando George mata a Lennie, es una especie de eutanasia o muerte digna. La eutanasia es un asunto político y moral muy controvertido, y en Shmoop preferimos ser cuidadosos y mantener la neutralidad en estos temas. Sin embargo, en lo que concierne a esta novela, está claro que matar a Lennie es lo correcto y que George tenía los pantalones bien puestos al apretar el gatillo.
¿Cómo sabemos esto? Primero, tenemos el ejemplo opuesto de Candy, que dice que él
"no debería dejar que ningún extraño mate a su perro" (shouldn't ought to of let no stranger shoot [his] dog) (3.234). Después, Slim dice: "Tenías que hacerlo, George. De verdad que tenías que hacerlo" (You had, George. I swear you hadda) (5), y Slim es el hombre ideal de la novela (Lee su "Análisis del personaje" para enterarte más del tema).
Entonces, ¿acaso George demuestra que ser hombre significa ser capaz de matar a alguien por su propio bien? ¿O es nada menos que nuestra única opción en un mundo desquiciado y desesperanzado?