Resumen de De ratones y hombres
Lennie y George son dos amigos que están de viaje, pero este no es el típico viaje divertido lleno de locas aventuras. Están en bancarrota y buscando trabajo en las granjas del norte de California. La falta de dinero es un problema, ya que planean tener su propia granja algún día. George es el autor intelectual de esta operación porque Lennie no es lo que podemos llamar una lumbrera. El dúo no logra conservar un trabajo por mucho tiempo debido a la mentalidad infantil de Lennie y su extraño fetiche por acariciar cosas, entre ellas, ratones, conejos, cachorros y mujeres. (Sin duda, esta última les trajo muchos problemas. De hecho, por ese motivo los echaron de su último trabajo).
La buena suerte los acompaña durante un tiempo cuando consiguen trabajo en un rancho cerca de Soledad, California. Entre sus compañeros de trabajo están Candy (un viejo manco dueño de un perro maloliente), Crooks (un peón de establo que, por cierto, es negro) y Curley (un hombre desleal con serios problemas de ira). Además, sabemos que Curley tiene una nueva esposa que nadie tiene permitido mirar. (No es una regla que haya impuesto ella, pues adora la atención masculina).
Además, conocemos a Slim, un sabio semidiós de rancho; y a Carlson, un cruel empleado del lugar, que aconseja a Candy que adopte un nuevo cachorro y mate de un disparo a su viejo perro porque huele mal. Pero, como Candy no es capaz de matar a su perro, Carlson lo hace en su lugar. Lindo gesto, Carlson. Y ese no es el único acto de violencia: Curley tiene ganas de pelear, pues sospecha (sin razón) que Slim está pasando demasiado tiempo con su chica, y entra en una disputa con Lennie, quien a su vez le destroza la mano.
Sí, esto tiene que causar problemas.
¡Ya es sábado por la noche! Para muchos empleados de la granja eso significa embriagarse y visitar el prostíbulo. Slim, Lennie, Crooks y Candy están conversando en el rancho acerca de sus sueños de tener una granja cuando la esposa de Curley aparece y se mofa de ellos. Los trata de débiles porque se quedaron en el rancho mientras el resto está en el prostíbulo (Lo que era sin duda, una actividad masculina, algo parecido a dispararle a tu propio perro). Cuando Crooks intenta echarla de la habitación, ella explota de ira y le recuerda que es "negro" (n*****) y que podría hacerlo "colgar de un árbol tan fácilmente que perdería la gracia" (strung up on a tree so easy it ain't even funny). Ese es el tipo de declaraciones que pueden arruinar una fiesta. Y así fue.
El domingo por la tarde, Lennie está en el granero con un cachorro muerto. Regaña al cachorro "por dejarse matar", lo cual creemos no es culpa del cachorro sino de Lennie. En ese momento, la esposa de Curley entra al granero y ofrece a Lennie dejarlo acariciarle el cabello. Sin embargo, a ella le preocupa que la despeine y trata de escabullirse para evitar que Lennie le arruine el peinado. Lennie entra en pánico, y por accidente, le rompe el cuello y la mata. Entra en pánico (otra vez) y sale corriendo.
Candy encuentra el cadáver de la esposa de Curley y corre para decirle a George, quien se da cuenta de que eso no puede ser obra de otro más que de Lennie. Cuando Curley se entera, se prepara para hacer justicia por mano propia, pero Slim y George quieren una muerte más digna para su amigo, que en ese momento está escondido en un lugar seguro, alucinando con conejitos. (No es broma).
Al final, George aparece. Actúa muy raro, así que estamos seguros de que algo malo está por pasar. Y no nos equivocamos. George comienza a hablar de la granja de sus sueños y le pide a Lennie que mire hacia el río y que se la imagine; y luego le dispara en la cabeza. Cuando el justiciero aparece, George inventa una historia de cómo Lennie terminó con un disparo después de que él intentara quitarle el arma. Ninguno entiende porqué George está tan alterado a excepción de Slim.
Perdón, creo que se nos metió una basurita al ojo. ¿No tendrás un pañuelo?