Teobaldo Capuleto
Teobaldo es el primo de Julieta, es decir, un Capuleto. Después de que mata al mejor amigo de Romeo, Mercutio, en una riña callejera, Romeo lo apuñala mortalmente para luego ser desterrado de Verona.
Teobaldo es un personaje cautivador, con mucha testosterona y casi siempre es muy refinado. No es particularmente profundo, pero es un personaje divertido de interpretar, ya que el actor debe decir varias líneas concisas y mostrar unas habilidades impresionantes con la espada. Mercutio, quien odia a Teobaldo, le da el malicioso sobrenombre de “Príncipe de los gatos”, que pega perfectamente con él. Mientras Romeo por momentos nos recuerda a un cachorrito saltarín y sobreexcitado, Teobaldo tiende a acechar por ahí en busca de peleas. Cuando su tío Capuleto le impide pelear con Romeo por haber irrumpido en la fiesta de disfraces de los Capuleto, Teobaldo se molesta y promete triturar el cráneo de Romeo después: “Me retiraré, pero esta intrusión que ahora grata parece, se trocará en hiel amarga”, pongámoslo en inglés también, porque lo que sigue es acerca de la versión original: “I will withdraw but this intrusion shall / Now seeming sweet, convert to bitt'rest gall” [1.5.6]). Claramente, a Teobaldo le gusta hablar en coplas rimadas (“shall” y “gall” riman), lo que le hace sonar un poco ridículo. Además no dice ni una línea que no sea gruñendo.
Aparte de la pelea entre los Capuleto y los Montesco, no existe explicación real para la agresividad de Teobaldo. Parece posible que esté ansioso por pelear solo para mantener su reputación de ser el más rudo de los Capuleto. También es probable que a Teobaldo simplemente le guste pelear, lo que nos lleva al siguiente punto: si hay una personificación del odio en la obra, ese es Teobaldo. Por ejemplo, mientras el súper macho Teobaldo hace un desastre en el baile amenazando con matar a Romeo (solo por ser un Montesco), Romeo y Julieta están a un par de metros de distancia queriéndose y profesándose amor (1.5). De hecho el primer encuentro entre Romeo y Julieta ocurre en el momento cumbre de la ira de Teobaldo.