Resumen de La casa en Mango Street
Cómo se desenvuelve la historia
Esperanza es una niña que se muda con su familia a una casa en la calle Mango. Es una casita roja venida a menos en un barrio humilde, muy lejos de lo que Esperanza esperaba cuando sus padres le prometieron que se mudarían a una casa.
Esperanza, a quién su hermana más pequeña, Nenny, sigue a todos lados, conoce a los demás residentes de la calle Mango y describe su difícil vida en una serie de viñetas, o bocetos cortos. La mayoría de los vecinos del barrio son hispanos, también Esperanza, ya que su padre es un inmigrante mexicano y su madre es latina. (Dicho sea de paso, échale un vistazo a la opinión de Sandra Cisneros acerca de los términos "Hispanic" y "Latino" en inglés en la sección "Trivia"). Al comienzo, el libro nos presenta una serie de personajes y explora sus trasfondos culturales y como fueron afectados por la pobreza, el exilio y las restricciones de roles de género estereotipados.
Esperanza siente vergüenza por la pobreza de su familia y describe varios momentos en los que miente o intenta esconder el hecho de que es pobre diciendo que vive en otra casa o escondiendo sus feos zapatos en una fiesta. La pubertad también le causa vergüenza a Esperanza, cuya experiencia de la adolescencia se vuelve aún más dolorosa de lo normal después de vivir dos episodios de agresión sexual. Uno en el que un hombre viejo la obliga a besarlo y otro en el que dos chicos la violan en un carnaval. Algunos de los amigos de Esperanza también sufren adversidades significativas: Alicia, que perdió su a mamá, es obligada por su padre a levantarse temprano todas las mañanas y cocinar tortillas para la familia; Sally, una hermosa niña de la escuela, soporta golpizas diarias de su padre; Minerva, una adolescente madre de dos hijos, sufre los idas y venidas y los golpes de su marido.
La madre de Esperanza la alienta a no dejarse retener por los hombres y a "no poner el cuello en la tabla de picar en espera de la cuchilla" del matrimonio (35.3). Al ser testigo del destino de sus compañeras de escuela que se casan para escapar del abuso de sus padres y terminan sufriendo el abuso de sus nuevos maridos, Esperanza decide irse de la calle Mango con sus libros y escritos. Sueña con tener una casa propia donde pueda escribir. Un encuentro con tres hermanas espirituales en un velorio del barrio sugiere que tendrá éxito al escapar, pero que nunca podrá negar su pasado. Las tres hermanas convencen a Esperanza de que, cuando se vaya, vuelva para ayudar a aquellos que no pueden irse tan fácilmente y que trabaje para hacer de la calle Mango un lugar mejor.