Elizabeth Lavenza
Caroline Frankenstein adopta a Elizabeth, nacida en una familia pobre italiana (pero no pasa nada, porque en realidad es hija de un noble italiano) a la edad de cinco años. Casi lo único que sabemos de ella es su apariencia: "a creature who seemed to shed radiance from her looks" (1.6); ella es "thin and very fair. Her hair was the brightest living gold … her blue eyes cloudless" (1.6); cuando crece, posee un encanto que supera la belleza de cuando era pequeña ("loveliness surpassing the beauty of her childish years") (7.45).
Claro, también está llena de sensibilidad e intelecto ("sensibility and intellect") (7.45), posee una mirada suave de compasión ("soft looks of compassion") y una dulce voz ("a gentle voice") (22.20, 21), aunque presentimos que son reflexiones secundarias. Para Victor, es una hermosa pertenencia. Su madre se la presenta como su bonito regalo ("pretty present") (1.7), y él interpretó sus palabras en el sentido literal ("interpreted her words literally") (1.7). Habla de querier fervientemente hacerla feliz ("dying to make her happy") (22.17) y de sueños paradisíacos de amor y alegría ("paradisiacal dreams of love and joy") (22.17), pero es difícil tomarlo demasiado en serio. Elizabeth es una herramienta: es "comprada" por su madre y usada por Mary Shelley para decir algo importante.
Tratamos, pero no pudimos entristecernos con su muerte. Por alguna razón, sosprechamos que tampoco a Victor le afectó mucho.