Charley

Charley es el vecino simpático de Willy. Representa a la voz de la razón y practicidad en un mundo de engaño y confusión. Charley es humilde, reservado, realista y honesto. Como tiene confianza en sí mismo, a diferencia de Willy, Charley no necesita jactarse ante nadie para sentirse mejor. En un momento de la obra, Willy se impresiona por enterarse de que Charley no ha gritado a los cuatro vientos el hecho de que su hijo, Bernard, tiene un caso en la Suprema Corte. 

Charley es el personaje con el que Willy siempre se compara. Willy constantemente critica a Charley por no ser agradable, por no estar interesado en el fútbol, por tener un hijo nerd y por ser un hombre de verdad. Pareciera que Willy siempre pone a su vecino por debajo porque está celoso de él. 

Willy no entiende por qué Charley es exitoso en los negocios y en su paternidad. Y más frustrante aún, es el hecho de que Charley es generoso y servicial, siempre le da consejos, dinero y hasta trabajo. Esto nos dice mucho de nuestro personaje principal; al rechazar la ayuda del vecino, Willy muestra su orgullo y su tendencia a la autodestrucción.