Yule May es una mujer con educación universitaria. También es la criada de Hilly Holbrook. Cuando a Yule May le faltan $75 para poder enviar a sus hijos gemelos a la universidad en vez de solo a uno, Hilly se niega a prestarle dinero, usando el argumento de que, según declara Aibileen, "un buen cristiano no da limosna a alguien sano y capaz, que es mejó enseñá a pescá a un pobre que darle un pescado" (19.163). Luego de que Yule May le roba a Hilly lo que resulta ser un anillo sin valor para intentar obtener el dinero de la matrícula, Hilly concierta un juicio súper rápido en contra de Yule May, junto con una multa de $500 y cuatro años en la Penitenciaría Estatal de Mississippi. (Este abuso del sistema de la justicia es una razón principal por la cual Criadas y señoras se suele comparar al clásico de Harper Lee Matar un ruiseñor).

Este acto de crueldad por parte de Hilly es lo que al final convence a muchas de las criadas negras de Jackson de trabajar con Skeeter y Aibileen en el libro. Se dan cuenta de que tienen que luchar si quieren mejorar las cosas, y la narrativa es su arma predilecta.