La hija de Zeus, Atenea, es la diosa de la sabiduría y patrona de la guerra. Por estos atributos, no nos debería extrañar que le guste un héroe con inteligencia como Odiseo. Tanto es que lo ayuda a hacer de todo; pequeños favores, elaboración de planes, sobrevivir, verse sexy. Atenea también se parece a Odiseo en su afición por los disfraces, como el anciano itacense, o el mendigo, o el príncipe residente. Pero para hacerlo más claro, la última línea del poema dice cómo la disputa entre Odiseo y las familias de los pretendientes muertos fue arreglada por Atenea quien “estableció entre ellos un pacto para el futuro, semejante a Méntor en el cuerpo y en la voz”.

¿Por qué a Atenea le gusta disfrazarse tanto? Tenemos dos ideas al respecto. Uno: porque es divertido y porque puede. Dos: es una forma de probar a los mortales, para ver si la tratan bien cuando se disfraze como uno de ellos. Tres: le ayuda a mantener un perfil bajo. Así, cuando ande por ahí con la égida en la mano, todos sabrán que habla en serio.

Y en realidad siempre va en serio. Solo mira qué tan a menudo Atenea logra su cometido, hasta en su interacción con los demás dioses. Cuando le pide a Zeus que le ordene a Circe dejar ir a Odiseo, él se tarda, pero eventualmente cumple con los deseos de la hija. Si estás buscando una heroína con poder, Atenea quizás le gane a Penélope (aunque la contienda es un poco injusta, por eso de que Atenea es una diosa). Pero el momento en el que de verdad vemos a Atenea haciendo uso de sus armas, es el último tercio del poema. Aquí es cuando de verdad se convierte en la encarnación de la justicia divina, estimulando a Odiseo a matar a todos los pretendientes. A todos nos sorprendió ver a Anfínomo morir de esa forma como los demás, y más sorprendidos aún de ver que Atenea, quien hasta ahora parecía perfectamente razonable, fue quien pidió su muerte.

La diosa reclama sangre, pero no debemos ver esta escena como evidencia de que Atenea es una diosa vengativa e injusta; simplemente tiene un sentido austero de la justicia, y así es como funcionaba la justicia en esos días. Para muestra, mira la insistencia de Telémaco después de la matanza en colgar a las criadas, para darles, al menos, la muerte más honorable posible. Los personajes creen que de esta forma la justicia será servida: con la hoja de una larga espada.

Una última cosa. Mientras que el interés de Atenea en ayudar a Odiseo tiene mucho que ver con la similitud en sus personalidades, también es posible que Atenea no haya tenido una relación muy positiva con Poseidón. Aunque Atenea y Poseidón hayan sido aliados en contra de los troyanos en la Guerra de Troya, también han tenido conflictos entre ellos. Una historia popular dice que el problema radica en saber quién sería el dios patrón de Atenas (claramente puedes ver quién ganó en esa disputa). No se habla explícitamente de esto en La Odisea, pero pudo haber formado parte de los antecedentes que la audiencia greca del momento ya conocía.