Néstor
Rey de Pilos y el primer hombre que visita Telémaco al buscar noticias de su padre. Néstor es otro gran ejemplo de un buen anfitrión griego, agasajando al príncipe itacense con regalos, comida e incluso transportándolo a su siguiente destino (Esparta). De hecho, es tan bueno, que Telémaco tiene que esquivar su palacio al regresar a Ítaca para evitar los grandes festejos que su visita provocaría.