Durante el sorteo, Porcia le ordena a la banda que toque música mientras Bassanio determina qué cofre va a elegir. La melodía que tocan ofrece sutiles indicios acerca de qué cofre es el correcto:

Dime dónde nace la pasión.
¿Es en el corazón o en el cerebro? ¿Cómo se engendra? ¿Cómo se nutre? Responde, responde.
Se engendra en los ojos,
se nutre de miradas y muere en la cuna donde reposa. (3.2.65–71)

La letra advierte que la "pasión" no puede crecer si se "engendra en los ojos" (basado en la mera apariencia física) en lugar del corazón. Por lo tanto, no nos sorprende cuando, después de oír la melodía, Bassanio declara que las "más brillantes apariencias" son lo que menos expresa la verdad. Esto sucede justo antes de elegir el cofre de plomo, el cual, como explicamos en "Los cofres de oro, plata y plomo", es un símbolo de la belleza interna y la modestia.