Viejo Major (un cerdo)
Al comienzo de Rebelión en la Granja, nos dicen que “el viejo Mayor, el verraco premiado había tenido un sueño extraño la noche anterior y deseaba comunicárselo a los demás animales” (1.2). El viejo Mayor es el animal más respetado de la granja, y es conocido por ser extremadamente sabio. Sospechamos que los animales no se reunirían por el simple hecho de que alguien tuvo “un sueño extraño”; pero confían en que Mayor tiene algo importante que compartir con ellos.
El mensaje del viejo Mayor es que los animales no tienen por qué vivir las vidas cortas y miserables que viven. Cree que el hombre puede ser culpado por su infortunio, “el único ser que consume sin producir” (1.9). En otras palabras, el hombre toma ventaja de los animales forzándolos a trabajar hasta morir, mientras que él (el hombre) no hace nada sino mandar. Y mientras los animales producen bienes (leche, huevos, fertilizante) el hombre se queda con sus productos. Como dice Mayor “¿No resulta entonces de una claridad meridiana, camaradas, que todos los males de nuestras vidas provienen de la tiranía de los seres humanos?” (1.11).
Pero Mayor hace más que describir el problema. También cree que tiene una solución. Dice que si los animales pudieran derrocar al hombre y controlar la granja, entonces todos vivirían en un estado de igualdad. Para recordarles este objetivo, les enseña el himno “Bestias de Inglaterra” el cual se continúa entonando muchos años después de su muerte.
El viejo Mayor, Karl Marx y el Manifiesto Comunista
El Viejo Mayor es la mímesis de Karl Marx en la novela, uno de los filósofos y teóricos políticos más famosos en la historia universal. Marx escribió un pequeño libro llamado El Manifiesto Comunista en 1848 que es hoy conocido alrededor del mundo, debido en gran parte, a la Revolución Rusa de 1917, en donde se trató de implementar muchas de las ideas marxistas.
El Manifiesto comienza diciendo que “Toda la historia de la sociedad humana, hasta la actualidad, es una historia de lucha de clases”. Marx explica las “tensiones internas” que llevarían al capitalismo eventualmente a autodestruirse. Se imagina que la siguiente etapa de la economía de la sociedad sería sin estado y sin clases sociales, y lo denominó “la dictadura del proletariado” (la clase trabajadora).
En Rebelión en la Granja, los animales representan al proletariado, a la clase trabajadora, a aquellos que se supone darán el paso a la siguiente etapa de la historia. Los humanos representan a los capitalistas, aquellos que toman ventaja de la clase trabajadora y se quedan con los bienes de su trabajo. Según Marx, solo a través de la revolución esta situación puede cambiar: “tiemblen, si quieren, las clases gobernantes, ante la perspectiva de una revolución comunista. Los proletarios, con ella, no tienen nada que perder, como no sean sus cadenas. Tienen, en cambio, un mundo entero por ganar. ¡Proletarios de todos los países, uníos!”
Mayor les da a sus animales un mensaje revolucionario muy parecido. Hasta les da un himno (“Bestias de Inglaterra”) para recordar. Aun así, tres días después muere, y comienza el lento proceso de distorsión y ruina de su legado.