De niña, la prima de Jane, Eliza, es simplemente otro miembro desagradable de la familia Reed; de adulta se convierte un una persona más puritana, correcta y reprimida mientras ve cómo los chicos van en manada con su hermana Georgiana. Al final, ella se convierte en una robot, con cada periodo de quince minutos de cada día de su vida planeados y organizados y sin ningún tipo de amistades o romances o relaciones amorosas. Cuando muere su madre, ella se muda a Francia y se vuelve monja.

La novela quiere que pensemos que ella tomó una muy mala decisión. En lugar de lidiar con sus celos y decepción, ella intenta eliminar todo tipo de emoción en su vida y pasar toda su vida siendo vacía e indiferente. Hmm. ¿Te suena como otros personajes que conocemos en la novela? Sí. Eliza Reed nos prepara (¡y a Jane!) para st. John Rivers.

Existe una gran diferencia: uno de los problemas de Eliza es que ella no se convierte en monja porque siente el llamado para servir a Dios sino que ella quiere huir del mundo. Por lo menos st. John tiene un legítimo "llamado" para ser un misionero.